Análisis Transaccional

¿Qué es el análisis transaccional?

El análisis transaccional es un sistema de psicoterapia nacida en los años 50 del siglo XX dentro de la denominada psicología humanista. Actualmente algunos de sus paradigmas están cambiando. Sin embargo, la práctica del método sigue persiguiendo que el paciente pueda cambiar sentimientos, pensamientos y comportamientos.

Eric Berne, nacido en Montreal en 1910, hijo de padre médico y madre escritora fue el creador del Análisis Transaccional (AT). Estudió Psicología y Medicina y en 1941, en plena Segunda Guerra Mundial, ingresa al cuerpo médico del ejército y empieza a trabajar en terapia de grupo con el objetivo de que los militares que se daban de baja en el ejército por causas psicológicas, tuvieran la oportunidad de conseguir suficiente grado de normalidad como para poder reintegrarse al servicio activo (Book, 1996).

Eric Berne planteó que si nos fijamos con atención cuando miramos y escuchamos a las personas que tenemos delante podremos apreciar cambios de estado, los cuales son simultáneos y afectan la expresión facial, el vocabulario, gestos y posturas. Este tipo de cambios es usual en todo sujeto, sea niño o adulto, no obstante, la persona sigue siendo la misma, ya que su estructura ósea, muscular y su atuendo no cambian (Book, 1996).

Los tres estados del yo en el análisis transaccional

Uno de sus casos era un abogado de 35 años, que solía decirle: “En realidad, yo no soy un abogado, ni siquiera un adulto; soy un chiquillo”. Fuera del consultorio, el hombre era realmente un abogado de notable prestigio, pero durante las sesiones se sentía y comportaba como un niño. Fue por ello que Eric Berne y su paciente denominaron a estas dos personalidades, el “adulto y el niño”. Poco después, surgió en el paciente un tercer personaje al que le llamaron “padre”, pues se parecía al progenitor del joven (Book, 1996).

Berne concluyó que esos tres estados existen en todas las personas, por lo que los denominó “estados del yo”: PAN (Padre, Adulto y Niño)

En el padre se hallan todos los avisos, todas las reglas, prejuicios, opiniones y leyes que el niño ha oído a sus progenitores y observado en su modo de vida. El niño, por el contrario, corresponde al registro de vivencias reales desde el nacimiento hasta los 5 años, es decir, los sentimientos experimentados por el paciente hasta esa edad (Book, 1996).

El adulto corresponde al registro de datos adquiridos y calculados por medio de la exploración y del testimonio personal. Hasta el décimo mes de vida, una persona tiene un padre y un niño, lo que le falta es la capacidad elegir sus respuestas, luego poco a poco comienza a experimentar y aprender por su propia cuenta. La misión del adulto no es excluir al padre o al niño sino verificar la fiabilidad de sus mensajes o si se quiere, en emancipar al individuo de los prejuicios que pesan sobre él (Book, 1996).

Conceptos básicos del Análisis Transaccional
  • Los Estados del Yo: Se trabaja en los tres niveles de los Estados del Yo. Por una parte, existiría el Yo Padre, que sería el estado influenciado por alguna figura autoritaria de nuestra infancia y, según el cual hablamos o actuamos. Por otra parte, estaría el Yo Adulto, que sería nuestra parte más consciente y racional y, por último el Yo Niño, que respondería a todos los deseos e impulsos propios de la infancia.
  • Las transacciones: Se denomina transacción al intercambio entre dos Estados del Yo, en respuesta a un estímulo.
  • Necesidad de reconocimiento de estructura: Estas necesidades, esenciales, deben contar con un equilibrio fisiológico y psicológico en buen estado. La toma de conciencia de que algo no funciona bien puede ayudar a cambiar.
  • Postura ante la vida: La postura ante la vida se determina en la infancia a partir de las conclusiones que el niño tenga de su valor, del valor de los demás y del mundo. Este concepto permite comprender cómo construye su identidad una persona y como establece sus relaciones en la actualidad.
  • La sensación de chantaje: Los cuatro sentimientos de base son la alegría, la tristeza, la cólera, el miedo. El niño aprende a veces a reprimir estos sentimientos para reemplazarlos por otro, el chantaje. Más tarde podrá mantener relaciones confusas al seguir utilizando estos sentimientos parásitos.
  • Guion de vida: Es un plan de vida inconsciente. Desde la infancia se toman decisiones para sobrevivir y responder a las necesidades inmediatas y más adelante, inconscientemente, se continúan tomando decisiones de esta forma, aunque sean nocivas.
  • Juego psicológico: El juego psicológico es la repetición a la edad adulta, de una secuencia, de un guion de vida, basado en un modo de comunicación de manipulación. El AT permite ayudar a la persona a encontrar la mejor forma de satisfacer sus necesidades en la relación.
  • La autonomía: La autonomía corresponde a la utilización de las capacidades de consciencia, de espontaneidad y de intimidad. Acepta la responsabilidad de lo que está viviendo, toma decisiones en función de sus criterios, vive sentimientos auténticos y percibe al otro y a sí mismo como una persona que merece respeto.
¿Cómo se llevan a cabo estas sesiones?

Una psicoterapia en AT se efectúa en el marco de un contrato establecido entre el terapeuta y el paciente. Se trata de diagnosticar, en un contexto concreto, que ‘Estado del Yo’ (Niño, Adulto, Padre) interviene y cuál es el ‘guion de vida’ inconsciente. Después se fija un objetivo de cambio y se puede aprender a analizar los modos de comunicación.

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